El Objetivo 9 pretende construir infraestructuras resilientes, promover la industrialización sostenible y fomentar la innovación.
El crecimiento económico, el desarrollo social y la acción por el clima dependen en gran medida de las inversiones en infraestructuras, el desarrollo industrial sostenible y el progreso tecnológico. Ante la rápida evolución del panorama económico mundial y el aumento de las desigualdades, el crecimiento sostenido debe implicar una industrialización que, en primer lugar, haga accesibles las oportunidades a todas las personas y, en segundo lugar, se apoye en la innovación y en infraestructuras resistentes.
La industria manufacturera mundial, considerada uno de los motores del crecimiento económico global, ha venido experimentando un declive constante debido a los aranceles y las tensiones comerciales, incluso antes del inicio de la pandemia de la COVID-19. El declive de la industria manufacturera provocado por la pandemia ha tenido graves repercusiones en la economía mundial.
Esto se debe principalmente a la elevada inflación, los cambios en el precio de la energía, las continuas interrupciones en el suministro de materias primas y productos intermedios, y la desaceleración de la economía mundial.Mientras que los países menos adelantados (PMA) de Asia han realizado progresos considerables, los PMA de África tendrían que cambiar la trayectoria actual e intensificar significativamente sus avances para alcanzar el objetivo de aquí a 2030. Sin embargo, las industrias de tecnología media-alta y alta mostraron sólidas tasas de crecimiento.
En 2022, el 95 % de la población mundial tenía acceso a una red de banda ancha móvil, pero algunas zonas continúan desatendidas.
A nivel mundial, la inversión en investigación y desarrollo ―así como la financiación destinada a infraestructuras económicas en países en desarrollo― ha aumentado y se han logrado avances impresionantes en la conectividad móvil, con casi la totalidad de la población mundial (97 %) viviendo al alcance de una señal celular móvil.
Invertir en infraestructuras (transporte, regadío, energía y tecnologías de la información y la comunicación) es crucial para lograr un desarrollo sostenible y empoderar a las comunidades de muchos países. Para alcanzar el Objetivo 9 en 2030, es esencial apoyar a los PMA, invertir en tecnologías avanzadas, reducir las emisiones de carbono y aumentar el acceso a la banda ancha móvil.
La industrialización inclusiva y sostenible, junto con la innovación y la infraestructura, pueden dar rienda suelta a las fuerzas económicas dinámicas y competitivas que generan empleo e ingresos. Estas desempeñan un papel clave a la hora de introducir y promover nuevas tecnologías, facilitar el comercio internacional y permitir el uso eficiente de los recursos.
La expansión de nuevas industrias significa una mejora del nivel de vida para gran parte de la población. El medioambiente se verá beneficiado si las industrias aplican prácticas sostenibles.
El precio a pagar sería elevado. Dado que la industria es uno de los principales impulsores de la agenda mundial para erradicar la pobreza y promover el desarrollo sostenible, acabar con la pobreza sería más difícil. Además, si no se mejoran las infraestructuras y se impulsa la innovación tecnológica, la asistencia sanitaria podría ser deficiente, el saneamiento inadecuado y el acceso a la educación limitado.
Establecer normas e impulsar regulaciones que garanticen que los proyectos e iniciativas de las empresas se gestionan de forma sostenible.
Colaborar con las ONG y el sector público para impulsar el crecimiento sostenible en los países en desarrollo.
Analizar el impacto de la industria en la vida y el bienestar de las personas y utilizar las redes sociales para presionar a los responsables políticos para que den prioridad a los ODS.
La recuperación de la industria manufacturera tras la pandemia de la enfermedad por coronavirus (COVID-19) sigue siendo incompleta y desigual. El crecimiento mundial de las manufacturas se ralentizó hasta el 3,3 % en 2022, desde el 7,4 % de 2021. Los progresos en los países menos adelantados (PMA) distan mucho de ser suficientes para alcanzar el objetivo de duplicar la cuota de la industria manufacturera en el producto interior bruto (PIB) para 2030. Sin embargo, las industrias de tecnología media-alta y alta mostraron sólidas tasas de crecimiento.
En 2022, el 95 % de la población mundial estaba al alcance de una red móvil de banda ancha, aunque algunas zonas siguen estando insuficientemente atendidas.
Las emisiones mundiales de dióxido de carbono (CO2) procedentes de la combustión de energía y de los procesos industriales aumentaron un 0,9 % hasta alcanzar un nuevo máximo histórico de 36 800 millones de toneladas métricas, muy por debajo del crecimiento del PIB mundial, con lo que se revierte una tendencia de desacoplamiento de las emisiones y del crecimiento económico, que duraba ya una década.
Para alcanzar el Objetivo 9 en 2030, es esencial apoyar a los PMA, invertir en tecnologías avanzadas, reducir las emisiones de carbono y aumentar el acceso a la banda ancha móvil.
Del empleo total, la proporción del empleo en fábricas siguió disminuyendo en todo el mundo, pasando del 14,3 % en 2015 al 13,6 % en 2021.
En 2022, el 95 % de la población mundial podía acceder a redes de banda ancha móvil, aunque algunas áreas siguen sin recibir esos servicios.
El gasto mundial en investigación y desarrollo (I+D), como proporción del producto interior bruto (PIB), aumentó desde el 1,69 % en 2015 hasta el 1,93 % en 2020. El número de investigadores por millón de habitantes ha aumentado en todo el mundo desde 1022 en 2010 y 1160 en 2015 hasta 1342 en 2020.
9.1 Desarrollar infraestructuras fiables, sostenibles, resilientes y de calidad, incluidas infraestructuras regionales y transfronterizas, para apoyar el desarrollo económico y el bienestar humano, haciendo especial hincapié en el acceso asequible y equitativo para todos
9.2 Promover una industrialización inclusiva y sostenible y, de aquí a 2030, aumentar significativamente la contribución de la industria al empleo y al producto interno bruto, de acuerdo con las circunstancias nacionales, y duplicar esa contribución en los países menos adelantados
9.3 Aumentar el acceso de las pequeñas industrias y otras empresas, particularmente en los países en desarrollo, a los servicios financieros, incluidos créditos asequibles, y su integración en las cadenas de valor y los mercados
9.4 De aquí a 2030, modernizar la infraestructura y reconvertir las industrias para que sean sostenibles, utilizando los recursos con mayor eficacia y promoviendo la adopción de tecnologías y procesos industriales limpios y ambientalmente racionales, y logrando que todos los países tomen medidas de acuerdo con sus capacidades respectivas
9.5 Aumentar la investigación científica y mejorar la capacidad tecnológica de los sectores industriales de todos los países, en particular los países en desarrollo, entre otras cosas fomentando la innovación y aumentando considerablemente, de aquí a 2030, el número de personas que trabajan en investigación y desarrollo por millón de habitantes y los gastos de los sectores público y privado en investigación y desarrollo
9.a Facilitar el desarrollo de infraestructuras sostenibles y resilientes en los países en desarrollo mediante un mayor apoyo financiero, tecnológico y técnico a los países africanos, los países menos adelantados, los países en desarrollo sin litoral y los pequeños Estados insulares en desarrollo
9.b Apoyar el desarrollo de tecnologías, la investigación y la innovación nacionales en los países en desarrollo, incluso garantizando un entorno normativo propicio a la diversificación industrial y la adición de valor a los productos básicos, entre otras cosas
9.c Aumentar significativamente el acceso a la tecnología de la información y las comunicaciones y esforzarse por proporcionar acceso universal y asequible a Internet en los países menos adelantados de aquí a 2020